Me gusta mucho, la vuelta que se le ha dado a los tradicionales vestidos japoneses, yo sé que cada una de sus prendas, al igual que en nuestro Perú, nos cuentan sin palabras sus origenes, luchas y victorias, y que es muy delicado saber cómo fusionar la tradición sin distorcionar su esencia.
Simplemente ver estás fotos es imaginar parte de las tradiciones japonesas con otros ojos, y me encanta.
El nombre de la modelo es Daphne Groeneveld y el fotografo es Mark Segal.
1.- Lo primero que noté fue el sombrero, y la clave de color, me preguntó cómo se verá en verdad, las intervenciones de color, influyen muchísimo en las fotos... (tip: todos nos vemos fabulosos en blanco y negro), es que mucho tiene que ver el tono de nuestra piel, el color de nuestro entorno, hay que pensarlo mucho antes de decidirse...)
Yo no me animaría a ponerme un T-shirt orange neon, aquí en Perú, ese color es distintivo de los señores que recogen la basura de las calles (sin ánimo de ofender).
2.- Me encantan los tonos fríos, pero espíritu intenso, el collar, el peinado y los zancos, me encantan, es bastante atrevido y audaz, yo valoro mucho a las personas que se arriesgan a mezclar todo tipo de texturas.
En lo personal, me gusta vestir cosas sin estampados tan escandalosos, mi estilo es más natural y antiguo. Además con mi altura en la vida me pondría un collar enorme, será para que compita conmigo hahaha y tampoco, tampoco eh.
En lo personal, me gusta vestir cosas sin estampados tan escandalosos, mi estilo es más natural y antiguo. Además con mi altura en la vida me pondría un collar enorme, será para que compita conmigo hahaha y tampoco, tampoco eh.
3.- El vestido parece de la realeza japonesa con una fusión europea, me encantan los detalles, existe mucha textura, pero el balance cromático armoniza cada elemento, que locura esos zancos!
4.- Me enamoré de los kimonos, simplemente son como los de los animes, siempre me ha gustado mucho el lado estético de la cultura japonesa, perfeccionista y delicado.
Me encantan sus cabellos, y estos colores están dando la hora, es nuestra oportunidad para vivir nuestro cuento de hadas, soñar con elfos y volar junto a las hadas.
Hay algo que me inquieta, siento mucha influencia europea en las fotos, creo que si recortará a la modelo y la colocará en otro escenario jamás hubiera sospechado que es para Vogue Japan.
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